Elkarrizketa

“El periodismo justo, verdadero y objetivo está en peligro de extinción”

Por: Itziar Lauzurika Salegi - Madrid

Un “salsero”, así es Jon Gomez Garai. 22 primaveras y con un programa propio en la pequeña pantalla. Un camino largo recorrido en pocos años y muchos proyectos de futuro que espera cumplir, entre los que se encuentra el Grado en Periodismo.

Te  defines como un salsero de la comunicación, ¿en qué proyectos has estado involucrado? ¿Cómo comenzaste tu carrera profesional?

Me defino como un salsero porque estoy metido en un montón de salsas. Empecé con dieciséis años en el mundo de la farándula (en el buen sentido de la palabra). Me llamaron para hacer la presentación de una fiesta anual a favor de todas las ikastolas de Bizkaia - Ibilaldia -, que iba a celebrarse en mi pueblo, Galdakao. Me volvieron a llamar de la organización del festival para que me incorporase en la Comisión de Cultura. Ahí estuve unos pocos meses hasta que me nombraron responsable de comunicación del Ibilaldia. Suponía mucha dedicación pero eso conllevaba estar en contacto con varios medios de comunicación de Bizkaia y Euskadi. Así, entre otros, me llamaron desde una televisión de la CAV - HamaikaTB - para hacer una entrevista en plató. Nada más finalizar la entrevista, se puede decir que salí de la redacción, y tras varias reuniones, con propuesta para presentar y dirigir un programa juvenil en el propio canal. Tenía 18 años y acababa de empezar mi carrera universitaria pero no podía desaprovechar esa oportunidad que me dieron.

Llevaba un año en HamaikaTB cuando me llamaron de ETB para presentar el espectáculo infantil Betizu. Con este antiguo pero conocido espectáculo recorrimos todo nuestro territorio durante dos años (más de 100 actuaciones) y ETB me empezó a proponer más trabajos. No podía estar en dos medios. Tuve que dejar HamaikaTB.

En ETB, llevo presentadas dos campañas (y  esperemos que muchas más) de Navidad con Izaro Iraeta, una reconocida presentadora de nuestro entorno; un espectáculo con la Orquesta Sinfónica de Euskadi (estamos preparando un segundo para diciembre) y varias galas y programas especiales en directo. Pero, sin lugar a duda, el programa más relevante hasta el momento ha sido IBIL2D, un programa que lo presentaba yo sólo todos los sábados por la noche.

Algo parecido al programa de Imanol Arias, ¿verdad?

Más bien algo parecido a lo que hacía el gran Labordeta hace unos cuantos años en TVE. En cada programa proponíamos un recorrido de unos 10 km, en el cual aparte de mostrar lugares de interés y curiosidades, entrevistaba a personas anónimas o famosos de la zona. También proponíamos comida típica. Con IBIL2D hice una temporada entera con buena audiencia, pero como las cosas no están como lo desearíamos, he vuelto a la universidad. Por supuesto, sin dejar la música y la “farándula”. [sonríe]

¿Cómo consigues unir la música y la comunicación en tu vida?

Para mí ha sido muy fácil unir el ser músico y cantante de un grupo, con ser presentador. Al final, todo está unido. Los dos están basados en subirse a un escenario delante de cinco  o miles de personas, es igual. El caso es que tienes que hablar y/o cantar delante de la gente.

¿En qué momento compaginas todo ello?

Llevo desde los seis añitos tocando el txistu, un instrumento autóctono de aquí, al igual que llevo desde pequeñito con una labia que muchas veces me pierde, ahora que me conoces ¿no crees? [ríe]. Todo es muy paralelo. Todo es espectáculo y los dos se basan en comunicar: hacer llegar a la gente algo. Si encima puedes llegar a la gente mediante las palabras y la música, yo encantado.

Con solo 22 años has tenido un programa semanal propio, has presentado varias galas… ¿te ves como un referente en el mundo de la comunicación?

No, pero la verdad que no me puedo quejar. Tengo 22 años  y he entrado en el mundo de la televisión, que es un monstruo, por lo menos a nivel vasco. Como mínimo estoy orgullosísimo y muy contento de poder pertenecer a ese colectivo y ser parte de ETB. ¿Que me considere un referente? Tal vez para una persona que está empezando o quiere empezar ahora, puede, pero no me creo un referente. Acabo de empezar y todavía me queda un largo camino por recorrer. Dentro de 30 años cuando intente hacer de la comunicación no solo el hecho de presentar, sino un poquito de justicia social, hablaremos, porque creo que en el periodismo hay muchísimo por hacer ceñido a problemas sociales y que desde los medios de comunicación se puede hacer muchísimo para arreglar este mundo tan complicado. Por lo tanto, un referente no, pero sí me considero un chico que esta súper orgulloso de lo que está haciendo y tiene por hacer, por supuesto. [sonríe]

¿El equipo con el que trabajas es también tan joven como tú o ha rodado durante años anteriores?

Claro. La gente con la que trabajo es mayor que yo. Gente muy profesional y con muchísima experiencia en el sector audiovisual. He conocido y sigo conociendo a grandes personas. El equipo de IBIL2D, por ejemplo, era genial y muy humano. Productores, realizadores, guionistas, editores, redactores, cámaras… todos unos profesionales como la copa de un pino. ¡Imagínate cuánto he aprendido de ellos!

Se dice que los medios de comunicación convencionales están llegando a su fin. ¿Crees que se desinflan porque no entienden lo que la gente quiere escuchar? 

Es un tema complicado. En general, los medios de comunicación convencionales obedecen al pensamiento único. Obedecen al sistema. ¿Qué está en contra de ese sistema? Todo lo que vaya en contra de un gobierno o su estado. Y como los medios fuertes dependen mucho de las subvenciones públicas (aunque sean cadenas privadas) siempre van a intentar ser políticamente correctos y no herir la sensibilidad de los mandatarios. Si encima pueden no-enfadar al gobierno y contentar a la ciudadanía, perfecto. Lo están consiguiendo, eso demuestran los datos de las audiencias, por lo menos.

Hablando de contentar a los políticos… después de las elecciones al Parlamento Vasco, ¿crees que se verá afectado el servicio público en el que trabajas?

 

ETB está bastante flojito por el tema de la crisis. El grupo EiTB (radiotelevisión pública vasca) ha sufrido un recorte de 12,9 millones de euros. Así que no hace falta que hablemos de elecciones para darnos cuenta de cómo esta el ente. Antes de que oliéramos que hubiera elecciones anticipadas en Euskadi, EiTB ya estaba haciendo muchísimo esfuerzo. Lo único que sabemos es que ha habido un cambio político y eso también influirá en el medio. Esperemos que a mejor.             

¿La fuerza política influencia en el medio la función de servicio público?

Inevitablemente, sí. Un gobierno siempre va a utilizar los medios que tenga a su disposición para hacer llegar al pueblo las noticias que ellos quieren y como ellos quieren. Por supuesto que tiene mucho que ver qué partido político este gobernando para que la radiotelevisión pública de cada país tenga una influencia ideológica u otra. Ahí esta el problema. Un medio público debe ser lo más objetivo posible y sin etiqueta. Para que sea creíble y de todos. Para que sea profesional.

¿Crees que es posible escapar del discurso apocalíptico que venden en las universidades en la que los medios tradicionales están dando sus últimos coletazos?

Ni creo ni quiero. Pienso que son necesarios para ofrecer entretenimiento, cultura, información… Y sobre todo para hacer una comunidad euskaldun, en nuestro caso, cada vez más consistente. Además, sigue siendo muy cómodo estar en el sofá y con solo mover un dedo, recibir entretenimiento e información. No descarto que vayan a desaparecer, pero no a corto plazo. Sí es verdad que el futuro está en Internet, hoy en día la mayoría de nosotros tiene acceso a la red y cada vez vamos a ser más los que acudamos a estos dispositivos para saciar nuestros deseos de información y entretenimiento.

Entonces, ¿crees que es necesaria la fusión entre medios tradicionales e Internet?

Por supuesto. Y ya es una realidad. Un medio de comunicación debe estar en todos los ámbitos comunicativos posibles. Corrígeme si me equivoco, pero creo que no hay ninguna televisión ni periódico que no esté en Internet. Sin embargo, sí los hay que están en Internet y no en formato analógico. Eso algo quiere decir. Si estas en el mundo analógico tienes que estar en Internet, pero si estas en Internet no tienes por qué estar en el mundo analógico. Eso es una muestra clarísima de que no solo el futuro, sino que también el presente, están en Internet. Sin esa fusión, los medios están condenados al fracaso.

 

¿Qué opinas sobre la propuesta de los sindicatos que han planteado exigir título de periodista para ejercer como tal?

Debemos diferenciar dos conceptos: periodista y presentador. Para ejercer de periodista me parece correcto y muy importante exigir el titulo. El periodista no tiene porqué ser presentador, y para ser presentador no tienes que ser periodista, sino buen orador y comunicador. Por lo tanto, aunque pueda haber personas que ejerzcan estupendamente su labor de periodista sin homologación, para garantizar unos conocimientos mínimos de la información y del periodismo en un medio informativo, veo lógico que se exija el título que lo acredite. Y con más razón aún, en un medio público.

Por alusiones, te diré que yo me considero presentador o comunicador, no periodista. Ni tampoco desempeño profesionalmente trabajos de periodista. El día de mañana, cuando finalice mis estudios periodísticos, podremos decir que soy periodista y podré trabajar como tal. Eso sí, a cualquiera que trabaje informando, le pediría que tuviera un poco de remordimiento y trabajara para hacer un periodismo justo, verdadero y lo más objetivo posible. Todo ello está en peligro de extinción.

¿Cómo ves el futuro del periodismo dentro de 10 años?

Dentro de 10 años el periodismo estará basado en Internet, sin lugar a duda. Además, aparte de que la sociedad se esté adaptando a un ritmo frenéticamente consumista a las nuevas tecnologías, en Internet no se miran tanto las audiencias y no abunda ni predomina la necesidad de dinero, por lo que (en estos tiempos que nos venden como “crisis”) será un soporte muy socorrido.

Y tú ¿dónde te ves dentro de 10 años? ¿Fuera de Euskadi?

Mi lengua materna es el euskera. He nacido en euskera y vivo en euskera en la mayor medida posible. Como debería de ser lógico, me arreglo mejor en mi idioma y tengo la suerte de trabajar en euskera. La mayoría de las presentaciones que hago son en euskera. Por lo que, hoy por hoy, no me veo en un medio español.

Es más, me gusta trabajar en euskera y quiero seguir haciéndolo así porque tengo un compromiso con este país y con este idioma; un idioma que necesita menos salvadores y más hablantes activos.

 Por Itziar Lauzurika Salegi, el 29 de octubre de 2012
para la Universidad Carlos III de Madrid.